SARA: nuevo papel
El antagonista masculino de Sara es el médico bostoniano Reginald Kernan, cuya agitada historia personal y humana tiene auténtico sesgo cinematográfico. Después de terminar su carrera de medicina, se dedicó al periodismo y su aventura bohemia le llevó a París, en cuyos barrios típicos le encontró un día Simone Signoret. Nada más ponerle la vista encima, no dudó en asignarle el primer papel de “Les mauvais coups”. Su nombre está ahora en auge y su larga figura no tardará en ser popular en todas las pantallas.
SARA MONTIEL
Con Sara y Kernan, Mario Girotti, el “bambino” que empieza a pisar con fuerza los Estudios de Roma. Y la dulce Alessandra Panaro, veterana en el lienzo de plata a pesar de sus escasos veintiún años.
“Pecado de amor” cuenta y desarrolla la dramática historia de una mujer zarandeada por múltiples y arrebatados avatares, que al fin encuentra la felicidad y la verdadera paz al otro lado de los muros de un convento. Será, pues, una nueva Sara Montiel en una difícil interpretación llena de hondura y matices inéditos. Aparecerá en la pantalla sin maquillar, totalmente identificada con el personaje de la madre Belén y dispuesta a sorprender al público cuando se convierta en espectador de la película que ahora ha empezado a nacer en las cámaras recién puestas en movimiento a la clásica voz de “¡motor!”.
Varios meses ha empleado Sara Montiel en estudiar este nuevo papel, lleno de dificultades como decimos. ¿Significa esto una variación total en su estilo? Por lo pronto, adelantaremos que seguirá entonando con su voz tan peculiar y expresiva las canciones que ella resucitó del antiguo acervo popular o las que popularizó con tanta fuerza expansiva como quedó inscrita en el mundo cinematográfico y el microsurco. Sara Montiel en suma, siendo la misma, ha querido probar en “Pecado de amor” sus cualidades de actriz interpretando el arduo papel de una religiosa, una monja sincera, llena de simpatía, moderna, abnegada, que renuncia al mundo con alegría y se encuentra a sí misma en la paz de su convento.
En su nuevo papel de “Madre Belén”, Sara Montiel emprende un nuevo rumbo en su carrera de “estrella” del cine español. Con “Pecado de Amor”, el título de su última película, actualmente en iniciación de rodaje, Sara Montiel seguirá contando para la pantalla, pero se meterá también en la hondura de un personaje inédito hasta ahora en sus incorporaciones cinematográficas. Ha querido, en fin, probar sus cualidades de actriz incorporando el difícil papel de una religiosa, como lo hicieron Imperio Argentina en “La hermana San Sulpicio”, Ingrid Bergman en “Las campanas de Santa María” y Audrey Hepburn en “Historia de una manía”.
Estos días rueda Sara los planos más difíciles de la película. Existe una prohibición total de visitar los platós donde están instalados los focos y las cámaras para las primeras secuencias, que no lo son en el orden cronológico argumental, sino en el orden técnico. Están prohibidas las visitas al rodaje para evitar que los ruidos y las conversaciones saquen a la actriz de situación. Amadori le da instrucciones en un rincón del decorado. Le habla reposadamente y nadie puede oír nada de su conversación. El papel que ha de representar es de la mujer, que, al cabo, tras una vida agitada y pecadora, ha descubierto una gran verdad, la más grande, la que conduce a Dios y, con Dios, a la verdadera vida del alma. En la perfecta interpretación de su difícil personaje demuestra cada día Sara Montiel su fibra de gran actriz dramática: es, dicen todos los que con ella conviven, el mejor papel de su carrera.
EL RECORTE XIII
El 22 de Abril de 1961, la revista española Gaceta Ilustrada, anunciaba el inminente rodaje de la que sería la gran película de nuestra estrella, Pecado de Amor. Pincha en el recorte para verlo más grande.
Pincha en el recorte para verlo más grande.
LA FOTO XIII
CELEBRANDO LOS 50 AÑOS DE PECADO DE AMOR
Sara Montiel, la Madre Belén reencontrándose con su pasado en la taberna de su barrio. Momentos antes de deleitar al mundo entero con su Flor del Mal.