SARA MONTIEL
“Tápame, tápame,
que tengo frío”
“Clavelitos, clavelitos de mi corazón”
Fotos: José María CASTELLVI
EL RECORTE LV
...y Sara Montiel también tuvo sus propias secciones en algunas revistas. Si queréis saber más sobre esto no dejéis de visitar www.montielprimerplano.blogspot.com. En este caso se trata de la revista Protagonistas. Sara hablaba cada semana de los temas más actuales. En este artículo, publicado el 17 de Marzo de 1982, hacía un repaso sobre los títulos pornográficos de la época y el Carnaval, especialmente cómo era vivido en Barcelona.
SARA MONTIEL
escribe
Hola. Holaaa… Holaaaa…
No sé si alguna vez ustedes, sobre todo vosotras, queridas lectoras, habréis prestado atención a los títulos de determinadas películas. La cosa tiene su gracia y si hablo de ello no es en plan de puritarismo, nunca he sido puritana, sino porque es el fiel reflejo del actual momento cinematográfico. Y a los que, como yo, amamos de verdad el cine, ello nos causa un profundo pesar y un malestar que no tengo por qué disimular.
Pero como vale más tomárselo a guasa pasemos revista a estos títulos, tan significativos. Vayan tomando nota: “Adolescentes al desnudo”, “Aberraciones sexuales de una rubia caliente” (en plan descriptivo, hay que reconocer que no se han quedado cortos), “Apocalipsis sexual”, “Orgía de las niñas cachondas” (he aquí otro que también se las trae), “Furor sexual de una ladrona” (tampoco se queda manco), “Historias pornográficas” (el autor de éste no se ha querido meter en florituras y se ha decidido por ir directamente al grano), “Con las bragas en la mano” (a buen entendedor sobran palabras), “La porno camarera” (este es comedido), “La caliente niña Julieta” (hay alguien que pueda dudar del contenido), “El lago de las vírgenes” (serán algunas de las mil vírgenes de Jardiel Poncela…?), “Pecados carnales de una campesina” (el autor de este título cree en el pecado), “La bestia en calor”, “Los hijos de p…” (una cosa fina), “Viciosas con los labios abiertos” (tan elocuente que sólo le falta ser en relieve), “Jóvenes amiguitas buscan placer” (y quien las vaya a ver, ¿qué?), “Hembra erótica” (que modositos), “Vicios pequeños”, “Garganta profunda” y así muchos más. Todo un amplio muestrario al servicio de eros y del porno.
Y lo cierto es que a mí este tipo de cine me trae sin cuidado. O sea que ni fu ni fa. Ni me escandaliza, ni me traumatiza, ni me come el coco, ni na, de na. Simplemente lo siento por el cine porque este tipo de producciones hacen muy flaco favor al llamado Séptimo Arte.
Pero pasemos a temas más alegres y más puros. Porque a pesar de todo lo que se nos ha dicho en estos últimos años, el carnaval, fiesta pagana tan prohibidísima hasta hace muy poco por estas latitudes, es un juego de niños, un juego inocente, comparado con tantas otras cosas que se nos ofrecen en bandeja. Pero para los castos y puritanos varones y estropajosas damas del “golpe diario en el pecho” conseguir que el carnaval estuviera prohibido era algo así como haberse ganado, sin pagar intereses, el eterno reposo de sus almas. Pero los tiempos han cambiado y ha vuelto este carnaval inofensivo que por lo menos alegra al personal, que buena falta nos hace.
Y también nosotros en el teatro hemos querido tener nuestro carnaval y organizar el consabido concurso de disfraces en una Barcelona que ha vuelto a disfrutar de una “Rua” animadísima por el bello Paseo de Gracia y con un sabroso pregón que mi querido Terenci se ha sacado de la manga y de su probado genio e ingenio. De vez en cuando entre video y video el Moix tiene sus momentos de inspiración y nos sorprende a todos con su buen hacer literario a prueba, incluso de carnavales (“Carnestoltes”, como le llaman en el país catalán). Y no ha faltado dentro de este Carnaval que ha repartido su sana alegría por todos los barrios barceloneses, un sabrosón baile y concurso de disfraces que ha tenido por marco incomparable “La Paloma”, una joya arquitectónica que hasta mi amigo Antio Ribas utiliza con mucho acierto en su último film titulado “Victoria” que actualmente está rodando por las calles y casas de su entrañable Barcelona. El concurso de “La Paloma” estuvo organizado por los “gays” que lucieron todo su característico ingenio adornándose con originalísimos disfraces y maquillándose mejor y con más fantasía que “la Montiel”. Que ya es decir.
Una servidora ha estado solicitadísima para formar parte de uno u otro jurado pero no me ha quedado más remedio que aceptar solo los concursos organizados por amigos a los que no se les puede decir que no, tales son los casos de Carlos Telmo en “Bacará” y Toni Guerrero en “Trauma”, porque con dos funciones diarias una no se puede permitir el lujo de salir “de farra” todas las noches. También mi amiga y compañera Mary Santpere ha presidido jurados carnevalescos, en la “Peña Solera” y en “El Corte Inglés”. Y lo mismo Guardiola y Calduch. Para este tipo de festejos los artistas siempre estamos solicitadísimos y muy a pesar nuestro a veces no nos queda más remedio que decir “que no”, porque si no nos pasaríamos todo el día y toda la noche en danza. Y luego, ¿quién es capaz de salir a trabajar dando el máximo rendimiento? Esta es la cuestión y deseo aclararlo para que no se lo tomen a mal todos aquellos cuya invitación no nos ha sido posible aceptar. Compréndanlo. Y recibid mis besitos de hoy, mis muás, sin careta ni antifaz.
FOTO: Aquí me tienen ustedes posando con mi hija, con sisfraz de "hombre araña" (Spiderman) y algunas de sus amiguitas que participaron en el concurso que organizamos en el teatro Victoria.
LA FOTO LV
Y aquí tienen a la estrella en todo su esplendor. Esta es la foto que ocupa la portada de esta entrada y que además obsequiaba en un poster interior. Pero también la revista Interviú para incluir en el número especial de su 35 aniversario en el año 2011. Estas son las palabras que la publicación dedicaba a la actriz:
"Nostalgia de Sara. Así se llamaba aquel reportaje de 1985. La Montiel o Saritísima fue la primera gran estrella española que dominó todos los medios. Ha sido transgresora, actriz, cantante, polemista y comprometida. Sin duda, mucho más que un cuerpo, pero qué cuerpo aquel".
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