SARA MONTIEL:
ONCE HORA PARA DORMIR, DOCE PARA TRABAJAR
Por unos días,
la ciudad marroquí de Casablanca se ha trasladado a Madrid. Y su puerto, el
puerto de Casablanca, a Alicante. Explicación: la película que está rodando
Sara Montiel y que dirige el francés Decoin se desarrolla en Casablanca. Pero
el equipo técnico y artístico no se ha destacado a dicha ciudad, sino que la
han filmado enteramente en Madrid. Excepto unas escenas de puerto que han sido
tomadas en Alicante.
La película
–titulada ‘Bésame’- es de suspense, de espionaje, de ambiente moderno. Se
desarrolla durante la segunda guerra mundial. Maurice Ronet es policía. Gerard
Tichy un oficial de la Marina alemana. Sara cantante de cabaret. Y canta, pero
no cuplés sino canciones, un poco distantes ya, pero próximas todavía. Los
títulos son: ‘Bésame’, ‘Acércate más’, ‘Vereda tropical’, ‘Pequeña flor’, ‘La
vida en rosa’, ‘María Dolores’, ‘Tatuaje’ y ‘Quizás, quizás, quizás…’, quizás,
ya que para esta última canción falta el permiso de su autor, que no lo puede
dar por estar incomunicado en una cárcel cubana.
Luce dieciocho
vestidos diseñados por ella misma y realizados por Asunción Bastida, que
Margarita –la encargada de Bastida- ha sabido interpretar fielmente. Los
colores también los ha elegido Sara. Son: negro, mostaza, lila, verde, blanco,
marrón y oro. El precio de dos de ellos está entre las sesenta y las setenta
mil pesetas.
Sara Montiel,
enamorada de su trabajo, vive sólo para él. Se levanta temprano, después de
haber dormido once horas. A las doce de la mañana ya está en el estudio para
maquillarse. Hasta las nueve de la noche no abandona el ‘plató’. Come en muy
poco tiempo. Se merienda un bocadillo de jamón. No fuma. No bebe. Y ha habido
escenas que le han retenido en pie y bajo los focos, sin sentarse ni apenas
moverse, cuatro horas.
En cuanto Sara
Montiel se enfunda en cualquiera de los trajes que saca en la película –trajes
largos- abandona la idea de volverse a sentar hasta que se lo quita. Es
materialmente imposible sin que el vestido se rompa. En vista de lo cual, Sara
se ha mandado construir un extraño aparato que viene a ser como una cama de
madera puesta de pie con unos reposabrazos. Cuando la estrella se siente
cansada, se apoya en la tabla que está ligeramente inclinada y dice que descansa.
En Hollywood, al menos, que es donde ella lo vio por primera vez, lo usan las
artistas con este fin.
Esta tabla de
madera es uno de los descansos de Sara. El otro, la hija de Daja Tarto, Pepita
Mena, que es la doble de luces de Sara. O sea la que aguanta a pie firme a que
se coloquen las luces necesarias para rodar las escenas. Mientras Pepita Mena
aguanta de pie la colocación de las luces, Sara permanece sentada en una silla
de lona haciendo ganchillo.
EL RECORTE CXXV
Anuncio de la película 'Noches de Casablanca' -que en América se llamó 'Bésame'- en la revista Hola el 13 de Diciembre de 1963.
LA FOTO CXXV
La diva en su film 'Noches de Casablanca'.
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