viernes, 25 de mayo de 2012

SINFONIA - 8 de Septiembre de 1969 - España


Agradecemos a Violeta Riscal el envío de esta revista. 


SARA MONTIEL
UNA MANCHEGA INTERNACIONAL




La popularidad de Sarita en países de las más diversas latitudes es cada vez mayor. En esta foto, tomada durante su reciente viaje a Moscú, nuestra compatriota se ve rodeada y aclamada por el numeroso público que, día tras día, visita el mausoleo de Lenin, en la Plaza Roja. 

A Sarita Montiel se la puede considerar, sin el menor lugar a dudas, como la actriz y cantante española más famosa dentro y fuera de nuestras fronteras.
Sus películas y sus discos constituyen verdaderos éxitos de público, no sólo en el ámbito de habla castellana, sino también en otros muchos países, como ha ocurrido recientemente en la Unión Soviética, donde se lleva exhibiendo triunfalmente desde hace más de un año aquel film tan conocido por nosotros, que llevaba por título ‘La reina del Chantercler’.



SUS EXITOS
En los orígenes de la larga carrera cinematográfica de esta actriz recordaremos aquella inolvidable cinta que se llamó ‘Veracruz’, en la que actuó al lado de los dos colosos de Hollywood, como el malogrado Gary Cooper y Burt Lancaster, siendo una de las primeras compatriotas nuestras que trabajó en el cine americano.
Pero el arte de Sara llegaría a la cima de la popularidad con el estreno de ‘El último cuplé’, cuyo éxito dio lugar a una serie de films posteriores, situados también en la misma línea. Cabe destacar entre ellos: ‘La violetera’, ‘Mi último tango’, la ya citada ‘La reina del Chantercler’ y otras muchas. También añadiremos que los discos correspondientes a las bandas sonoras de estas cintas han obtenido un volumen de ventas verdaderamente increíble.



Una de las más características perspectivas moscovitas: el Kremlin. Al pie de la torre principal, Sarita Montiel tuvo la amabilidad de posar para nuestro fotógrafo. 

SUS VIAJES
Sarita conoce, a través de sus innumerables viajes, los cinco continentes. Precisamente, estos largos recorridos suyos a través del globo le han valido para promocionar por todas partes sus éxitos discográficos y cinematográficos. Pero, más concretamente, podemos decir que donde más popularidad tiene, fuera de nuestras fronteras, es en el Brasil, donde rodó la película ‘Samba’, y en Rusia,  a donde lleva efectuados tres viajes, en el último de los cuales fue expresamente invitada por el Jurado del Festival de Cine de Moscú, que le concedió la medalla Lenin de la popularidad. Desgraciadamente, no pudo recoger este galardón, pues estando allí le fue notificada la gravedad de su madre, recientemente fallecida.




Como una bella cicerone, Sarita nos fue mostrando uno a uno los principales monumentos con que cuenta esta ciudad. Aquí la vemos junto a la catedral de los Doce Apóstoles. 

SUS PROYECTOS
En la actualidad, Sarita Montiel tiene pensado rodar una coproducción en la que interpretará el papel de Catalina la Grande, y que se rodará en Rusia. También ha firmado un contrato con una productora americana para trabajar en tres películas. Proyecta, asimismo, presentar en Madrid y Barcelona un espectáculo musical en el que actuará por primera vez en público, y que se titulará ‘Sara Montiel, en persona’. Pero lo que más la ilusiona es participar en el rodaje de ‘La espía de Castilla’.
No dudamos de que Sarita verá cumplidas muy pronto todas estas ilusiones. 



El monumento a los astronautas, construido con el mismo material que las naves espaciales, se eleva al cielo como queriendo echar a volar. Aquí sirve de fondo a la foto de nuestra actriz. 
Esta sustuosa pieza en que vemos a Sarita no es otra que la habitación del último Zar ruso, que conserva en su decoración y en sus muebles toda la majestuosidad y lejano esplendor de los días de la antigua monarquía rusa. En la actualidad, el palacio está convertido en museo, para atracción de los turistas y de todos cuantos quieran visitarlo. 


V.L.




EL RECORTE LXVI
Si en 1969 la diva viaja por tercera vez a Rusia, en 1977 era el famoso circo del país quien brindaba a Sara todo un homenaje: le entregaban la llave de Moscú. Así lo recogía la revista Diez Minutos el 11 de Julio de 1977. 

El humor presidió el homenaje de despedida a
SARA MONTIEL
Los miembros del circo ruso le hicieron varios regalos, como la llave de Moscú


Sara Montiel nos muestra la llave de Moscú y un paquete de cigarrillos, regalo de los componentes del circo ruso de Moscú. 

Cuando cumplía las doscientas cincuenta representaciones de ‘Increíble Sara’, la Montiel ha suspendido en pleno éxito su actuación madrileña para retirarse unos días a descansar a Mallorca –y curarse una tremenda gripe por prescripción facultativa- antes de comenzar una gira monstruo por Andalucía y el norte de España.
Para despedir a Sara en su última actuación madrileña se organizó un fin de fiesta que estuvo presentado por Agustín Trialasos y que por expreso deseo de la Montiel estuvo presidido por el humor, a cargo de Andrés Pajares, Juanito Navarro y Fernando Esteso. Ni que decir tiene que el público que abarrotaba el teatro rio a mandíbula batiente las acertadísimas intervenciones de los tres humoristas y caricatos, que hicieron las delicias del respetable con sus parodias e imitaciones.



Sara Montiel es entrevistada por Agustín Trialasos, cara al público, a fin de que explicara su inesperada retirada de cartel. 
Fernando Esteso y Juanito Navarro con Sara Montiel, tras el fin de fiesta a la que acudieron los famosos y populares cómicos. 

Esa misma tarde, componentes del circo ruso de Moscú estuvieron a ver a la Montiel (ya se sabe que Sara es estrellísima en la Unión Soviética), regalándola una simbólica llave de Moscú, así como discos y cigarrillos rusos.
Mientras que Andrés Pajares sigue cosechando un éxito tremendo con ‘Burrus’, Juanito Navarro nos contó que se marchaba a Puerto Rico para trabajar en una producción de Masó ‘La Coquitos’ ‘¿La Chelito?’, junto a esa joven belleza llamada Iliana Ross, que presidió la portada de nuestro pasado número, en un papel totalmente diferente de lo que ha hecho hasta ahora –un ‘manager’ un tanto tirano- que puede suponerle una nueva y futura dimensión en el cine; Fernando Esteso, por su parte, tiene a punto de caramelo un nuevo disco (con mucha miga política dentro), del que se espera sea un impacto grande –por lo menos- como ‘La Ramona’ y como ‘Zurriagazo’. Referente a Esteso añadiremos que a RTVE parece no gustarle ni pizca que éste haga caricaturas de determinados programas (recuérdese el acertadísimo de ‘¿Quién es?’) en ‘625 líneas’, y que han cortado este tipo de iniciativas del humorista para que se limite ‘a hacer reír, que es para lo que se le paga’.



La noche terminó de copas en Mayte. Vean a Clara Benayas ('La Ramona') y a Norma Duval, con Sara Montiel, que tiene en brazos un nuevo caniche al que ha bautizado con el mismo nombre del que se le murió: 'Cuchy'.


Texto y fotos: F. RETRO.




LA FOTO LXVI

Celebrando los 50 años de 'La Bella Lola'


Sara Montiel, impresionantemente bella, durante el rodaje de la famosa película. 




viernes, 18 de mayo de 2012

AMA - Agosto Segunda Quincena de 1972 - España

Agradecemos el envío de esta revista a Violeta Riscal. 

Es su secreto para mantenerse tan bella
SARA MONTIEL
HACE YOGA


LLEVA UNAS OSCURAS GAFAS DE SOL PARA DISIMULAR EL CANSANCIO QUE LE SALE A LOS OJOS. LLEVA EL PELO RECOGIDO EN DOS TRENZAS, NO LLEVA NI GOTA DE MAQUILLAJE. SARA MONTIEL SE ACABA DE LEVANTAR. LA NOCHE HA SIDO AGOTADORA PARA ELLA: HASTA LAS CINCO DE LA MAÑANA ESTUVO CANTANDO EN UNA SALA DE FIESTAS; HA DORMIDO POCO, Y AUN LE DUELEN LAS PIERNAS DE ESTAR DE PIE.

-El dueño del local me dijo que ésta iba a ser una noche tranquila: “Ya verás, como es lunes, vendrá menos público que ayer y podremos terminar antes”. Pero se llenó la sala; tú lo viste, ¿verdad? Es terrible. En sólo cinco días que llevo, se calcula que han pasado más de 20.000 personas; y tienes que cantar, actuar…, porque yo no engaño al público. Pongo toda la carne en el asador; tampoco engaño a nadie, la gente que va a verme paga su entrada, no llevo ‘fans’ con entradas regaladas. ¿Comprendes…?
-Por supuesto, Sara. ¿Pero por qué trabajas tanto si es tan agotador?
-Porque si no trabajo me aburro; me gusta hacerlo, es mi oficio y quiero hacerlo bien ya que tengo una responsabilidad para con los demás.
-¿No será por falta de dinero?
Me mira sorprendida.


EL ARTE Y EL DINERO SON COSAS DISTINTAS
-¡Qué tontería! No tiene nada que ver el arte con el dinero. Sara Bernhardt, por ejemplo, que murió a los setenta y tantos años, y le faltaba una pierna, salía a trabajar; y era una señora célebre y multimillonaria. Si fuese por el dinero, Picasso, entonces, tendría que terminar de pintar, porque hace ya muchos años que no sabe los millones que tiene. El arte es crear, y eso lo haces con dinero o sin él. El artista no trabaja por necesidad, trabaja siempre para crear.
-Entonces, ¿qué supone el dinero para ti?
-Es una seguridad… ¡Ni eso! Porque he sido muy feliz cuando no tenía nada. En cambio, cuando lo he tenido casi todo, no he llegado a ser feliz, porque el dinero, a veces, sirve nada más que para, en un momento dado, comprar medicinas para salvarte y no morirte o no morirse la persona que quieres… Pero la vida es de una forma que, según pasa el tiempo, gente a la que quieres muchísimo desaparece para siempre, sin que puedas remediarlo. 



NO LE ASUSTA LA VEJEZ
Se ha puesto un tanto triste, y también ‘Cuchi’, la perrita negra que no puede vivir sin su ama, la de las uñas pintadas en rojo, que ha venido a consolarse en su regazo porque le asustan las personas vestidas de negro y un camarero acaba de pasar cerca de ella.
-¿Te asusta la vejez, Sara?
-No. Creo que todos tenemos que envejecer, si es que llegamos a ello y no nos morimos antes, y yo no quiero, como me imagino te ocurrirá a ti, morirme.

LA EDAD DE SARITA
-Y ya que andamos con el tema de los años, de la edad, ¿por qué siempre hay tanto lío en torno a tu edad?
Saca de su bolso blanco el carnet de identidad.
-Toma, lee y entérate. ¿Qué dice ahí? Nací en 1933, ¿no? Luego echa cuentas; tengo treinta y nueve años…
Pues sí, eso dice el carnet.
-Mira, Elizabeth Taylor empezó mucho antes que yo y tiene cuarenta años. Sofía Loren empezó en el 50 y tiene ya treinta y nueve. Yo empecé también en la época de ellas. Lo que pasa es que yo he triunfado antes, más joven que todas ellas, y la gente, por ese motivo, me echa más años. Pero puedes fijarte en mi piel, no llevo maquillaje y no uso cremas especiales, sólo una muy barata. Hay mujeres por ahí que con treinta años tienen una piel viejísima, pero yo tengo esa suerte, ¡qué voy a hacer!...

“ESTOY ENTRE LAS CUATRO MAS FAMOSAS DEL MUNDO”
-Te has referido a tres actrices consagradas en el cine mundial. ¿Está el nombre de Sara Montiel al mismo nivel que ellas?
-En España, no lo sé; pero mundialmente sólo somos cuatro o cinco mujeres importantes en el cine.
-¿Quiénes son?
-Pues Sofía, Brigitte, Elizabeth. Mujeres que, ¡paf!, ¡damos el trancazo! Bueno, en América, también está Barbra Streissand, y el resto…, pues yo.
-¿Y cómo se puede saber eso?
-Pues porque no hace falta decir el apellido para que se sepa que somos nosotras. Además, las cifras lo dicen. Tú te vas al Ministerio de Información y Turismo y te enteras. Sí, hija sí, por la cantidad de divisas que ingresa una película. Las mías traen aquí más divisas que las de nadie. Igual pasa en Francia con Brigitte, y en Italia con Sofía…

“NO SOY NI FEA NI EXTRAORDINARIA”
-¿Por qué crees que has triunfado, por tu belleza, por tu estilo, por qué?
-Pues no lo sé. Yo no me considero una mujer fea, pero tampoco extraordinaria. Me parece que si he triunfado es porque le he gustado al público y, como él es quien decide, decidió hacerme Sara Montiel, y aquí estoy, gracias al público.
-¿Ninguna persona en especial te echó una mano?
-Nadie. O mejor, sí: la persona que más me ha ayudado en todo ha sido mi madre, que me alentó y me empujó a ser lo que soy. 





Sara nos hace aquí una breve exhibición de yoga, ese 'misterio' hindú que mantiene en forma el cuerpo y el espíritu. 

EL AMOR
-¿Cuántos hombres se han enamorado de ti?
-Que me lo hayan dicho, bastantes. Recibo declaraciones todos los días y no sólo de españoles. Incluso cuando estoy en la pista trabajando, se me declaran… ¡La gente es estupenda!
Sara Montiel, en esto, no exagera. Nosotros sabemos de un sueco que enloqueció por ella, y de un turco que tenía una joyería en el Gran Bazar de Estambul y hacía grandes rebajas en el oro y la plata si los compradores eran españoles y le prometían enviarle un disco de Sara Montiel firmado por ella. Supongo que le dieron muchos timos. Era sefardita, pero se dejaba engañar por amor.

SU SECRETO ES EL YOGA
De pronto, Sara se ha puesto enigmática. Cambiamos de tema.
-Por lo menos, nos dirás qué es el amor para ti.
-Entregarse por completo sin recibir nada a cambio.
-¿Qué tienes más, amigos o enemigos?
-Amigos tengo pocos, pero buenos, y enemigos, no lo sé, porque yo nunca he hecho daño a nadie…
-¿Te lo han hecho a ti?
-Si alguien me ha hecho daño, he sentido pena por él.
-¿Cuál es tu secreto para mantenerte en forma?
-Hacer yoga, en mi casa o en la piscina. Pero esto no lo sabe nadie…
Sara, la incomparable Sara, nos da ahora una muestra de su agilidad para la gimnasia y el yoga.
-Este reportaje fotográfico no lo ha hecho nadie, ¿sabes? Así que es una exclusiva mundial.




Alicia FERNANDEZ
Fotos: José Antonio


EL RECORTE LXV
Si en los '70 Sara afirmaba que el secreto de su belleza era el yoga, en los '90 lo atribuía a sus baños de alcohol. Pero cuidado que más de una lo intentó y acabó 'achicarrá', como la propia artista narraba.... Esto es lo que nos contaba sobre la diva la revista Sorpresa en Enero de 1999. 

SARA MONTIEL:
“Me conservo en alcohol”



Nuestra Saritísima recibió la pasada semana un nuevo homenaje, esta vez en una discoteca de Madrid.
-Sara, ¿cuántos premios y homenajes van ya?
-¡Ni lo sé! Tengo tantos trofeos que ni me caben. Desde 1957, cuando hice El último cuplé, han sido muchos…
-Vas vestida muy atrevida…
-Me gustan mucho las transparencias. Pero no es algo de ahora, que están de moda. Me han gustado siempre.
-¿De quién es ese conjunto tan sugerente que llevas?
-De ese diseñador italiano tan famoso… ¿Cómo se llama?... ¡Valentino!
-¿Cuántos abrigos de visón tienes?
-A ver… Con este blanco y negro que me han regalado mis hijos esta Navidad son ya siete visones.
-¿Es un abrigo español?
-No, es de Milán.
-¿Cómo los guardas en verano?
-Los llevo a un lugar refrigerado.
-¿Es cierto que te bañas en alcohol para conservarte?
-Sí, cada tres días me baño con agua y alcohol, pero de 60 grados, no de 90, que quema mucho. Es algo que hago desde hace mucho tiempo por las mañanas.
-¿Algún otro ‘truco’ de belleza?
-Cuando se me acaba la crema hidratante me pongo un poco de mantequilla en la cara por la noche para que no se me reseque.
-¿La coges de la nevera?
-Sí, claro. No es algo que haga habitualmente, sino sólo cuando se me olvida comprar crema.
-¿Haces dietas?
-Sí. Siempre hago dietas.
-Háblanos de tu nuevo ‘amigo’.
-Pues eso, que es sólo un buen amigo.
-Cuéntanos algo más.
-No puedo. Sólo que es un profesor al que conocí en León. Es un hombre muy inteligente y muy culto. No te puedo decir el nombre.
-¿Cuál ha sido la mejor época de tu vida?
-Sin duda, la que estuve casada con Pepe. Fue maravillosa.

N. Fresno
Fotos: Antonio Cuenca


LA FOTO LXV



Sara, impresionante, con el mismo tocado que el de la portada de Ama. 

sábado, 12 de mayo de 2012

PRONTO - 28 de Agosto de 1993 - España


SARA MONTIEL
AUN NO HA SUPERADO LA PERDIDA DE SU MARIDO
LA ARTISTA HA REAPARECIDO ANTE EL PUBLICO EN LEGANES Y CONFIESA QUE LE RESULTA MUY DURO TRABAJAR SIN LA COMPAÑÍA Y EL APOYO DE PEPE TOUS, FALLECIDO EL PASADO AÑO



Cuando se cumple un año de la muerte de su marido, Pepe Tous, fallecido el 25 de agosto de 1992, Sara Montiel vuelve a los escenarios, ante el público, en vivo y en directo, para cantar en las galas de verano las melodías de siempre, ‘Bésame mucho’, ‘Fumando espero’ y todas aquellas canciones que la hicieron inolvidable y que la convirtieron en la estrella de categoría internacional que es desde hace muchos años.
El escenario vuelve a ser su vida, pero guarda aún una gran pena dentro de ella. Una pena que ni siquiera el público y el tiempo pueden borrar.
Sara se reintegró a su trabajo en el programa televisivo ‘Ven al paralelo’ poco después del fallecimiento de Pepe Tous, fallecido a causa de un cáncer de colon. Con el corazón destrozado a causa de la irreparable pérdida, pero consciente de su obligación y de que se había convertido en el único punto de apoyo de sus dos hijos, Thais y Zeus, la artista relegó su dolor a un segundo plano para mostrar a todos su coraje y su gran sentido de la responsabilidad hacia la profesión que tantos éxitos le ha dado y hacia su público querido. Y ahora, que Sara se ha reencontrado con el público en estas galas veraniegas, como la de las fiestas de Leganés, donde pudimos entrevistarla, sigue mostrando el mismo valor y la misma entrega. Como ella misma dice: ‘Hay que seguir luchando’. Pero en su rostro se refleja la pena que la acecha en estos momentos, al cumplirse el primer aniversario de la muerte de su marido. 

-Sara, ¿hacía mucho tiempo que no subías a un escenario?
-En directo sí. Un año, desde la muerte de mi marido, y es que lo he pasado muy mal.
-¿Significa esto que ya lo has superado?
-No, eso nunca se supera. Se sigue viviendo porque la vida te empuja y porque hay que seguir luchando, sobre todo cuando hay hijos, pero es una pérdida muy grande como para poder olvidar. Yo nunca superaré la pérdida de mi marido. El era todo para mí, mi amigo, mi compañero, mi amante, mi consejero, el padre de mis hijos…
-El siempre estuvo a tu lado, en cada espectáculo, supongo que por ello cuando te enfrentas nuevamente al público es cuando más le echas de menos.
-Ha sido muy difícil para mí volver al trabajo y ahora pisar de nuevo un escenario, pero yo soy muy profesional y como yo supongo que habrá gente que también lo habrá pasado mal, o peor. Bueno, peor no creo que pueda pasarse, porque ha sido un año realmente angustioso.
-¿De dónde sacas ahora las fuerzas?
-Di mis hijos. Ellos me ayudan a seguir viviendo. Y también del recuerdo. Hay que seguir adelante, no se puede vivir llorando todo el día.
-¿Dónde están ahora Thais y Zeus?
-Los he dejado en Miami, de vacaciones. Yo he venido de allí hace unos días y ahora voy a ir a Córcega, donde me han invitado unos amigos. A finales de este mes volveré con ellos.
-¿Qué opinan ellos de que tengas que trabajar continuamente?
-Ellos saben que tengo muchas responsabilidades y que tengo que seguir trabajando, porque no viene el maná del cielo. Lo entienden bien y aunque les gustaría pasar más tiempo conmigo, aceptan que es mi trabajo y en el fondo están orgullosos de que sepa cumplir con mi obligación.
-¿Cómo te quedan aún fuerzas, después de todo lo sucedido?
-Porque están los niños, y mis amigos. Para todos ellos aún tengo todas las fuerzas del mundo.
-¿Cómo estás viviendo estas fechas en que se cumple el primer aniversario de la muerte de tu marido?
-Aunque ahora esté en el escenario y a finales de mes me marche a Estados Unidos a trabajar, la fecha de la muerte de Pepe es para mí sagrada. Ese día lo pasaré en la intimidad.
-Creo que tus amigos también te han ayudado mucho a superar esto.
-Sí, no te equivocas, creo que tengo los mejores amigos del mundo.
-También tu trabajo ha sido importante en esta etapa. ¿Qué valoración haces de tu programa ‘Ven al paralelo’?
-Pues teniendo en cuenta que comenzamos con veintidós programas y terminamos con cincuenta y dos, creo que ha sido bueno. La aceptación ha sido importante y la audiencia también.
-¿Cuándo te volveremos a ver nuevamente en televisión?
-Dentro de unos meses. Seguramente a finales de este año o principios del siguiente. 





Indudablemente, Pepe Tous fue para Sara Montiel el hombre de su vida, su gran amor. La actriz, que había estado unida anteriormente al director cinematográfico Anthony Mann y al industrial valenciano José Vicente Ramírez Olalla, conoció a Tous el 28 de febrero de 1970, una fecha grabada a fuego en el corazón de la artista. El flechazo surgió de inmediato.
La felicidad de la pareja fue culminada con la llegada de Thais a su hogar, una niña nacida el 3 de marzo de 1979, que fue adoptada por la pareja, y posteriormente, con la adopción de Zeus, un niño nacido el 21 de mayo de 1983.
Sara y Pepe Tous formaron un matrimonio de los más compenetrados del mundo artístico. El dejó sus actividades empresariales y editoriales para dedicarse de lleno a la carrera de su mujer. A lo largo de todos estos años, siempre permanecieron juntos y felices, hasta que a primeros de 1992, surgió amenazante la enfermedad que tendría que poner fin a la vida de Tous. 



Sara Montiel acusa en su físico la mala racha que le ha tocado vivir en este último año, tras la muerte de su marido, que aún no ha superado. 
La artista hace apenas unos meses. 

Cuando falleció, el 25 de agosto del pasado años, Sara se vino abajo. Habían sido muchos meses de angustia y de impotencia ante lo inevitable, intentando que él creyera que todavía existían esperanzas de curación. No pudo ser así y la genial artista tuvo que decir adiós definitivamente al amor de su vida. Pero quedaban unos hijos ‘por los que luchar como una leona’, según palabras de la propia Sara a los pocos días del fallecimiento de su marido. Y ha cumplido su promesa. Thais y Zeus pueden sentirse orgullosos de su madre, como debe estarlo Pepe Tous desde donde se encuentre, al ver que Sara ha cumplido su último deseo: que siguiera trabajando y luchando por sus hijos y no precisamente en circunstancias especialmente favorables, puesto que tras la muerte de Tous, a Sara le quedó la difícil papeleta de ayudar a superar el golpe a sus hijos y también de darle la fatal noticia a Zeus, el menor, el cual había vivido hasta aquel momento ajeno al drama familiar. No obstante, sacó fuerzas de flaqueza para cumplir con su cometido y los niños fueron poco a poco recuperándose de la pérdida de su padre.
También fue duro para ella volver ante las cámaras de televisión cuando apenas le quedaban ánimos para seguir viviendo. Pero lo hizo, consciente de la importancia que esto tenía para cuantos la rodeaban.
Y hacia finales de la primavera pasada, se tuvo que enfrentar a una difícil situación al recibir amenazas de muerte hacia ella y sus hijos, además de ser atacada en Madrid por unos exaltados que golpearon su coche. Al parecer, los motivos eran políticos, puesto que los hechos sucedieron en vísperas de elecciones.
Esperemos que este verano haya supuesto el final de una mala racha y el inicio de una etapa más feliz para ella.


Texto: ALMUDENA CARRERO E I. BERNAL
Fotos: EUROPA PRESS


EL RECORTE LXIV
Seguramente en estos años Sara recordaba mucho los tiempos en que conoció a Pepe Tous. Todos sus proyectos comunes, ilusiones... En este artículo de la revista Garbo del 11 de Diciembre de 1974, Sara Montiel se mostraba ilusionada con su Pepe y su Palma. Era tajante, quería casarse con José Tous Barberá. 

SARA MONTIEL
“ME CASO CON PEPE TOUS”



-Mi proyecto más importante a nivel personal es casarme con Pepe Tous en cuanto consiga la anulación de mi matrimonio con Chente Ramírez Olalla. Creo que esto lo conseguiré a finales de este año y que a principios de 1975 podré casarme con Pepe. Lo deseamos los dos porque nos queremos y porque nos sentimos bien juntos. Tengo muchas ganas de casarme con Pepe, llevamos ya un tiempo juntos y hemos aprendido a querernos y respetarnos.



Vean, vean lo guapa que está Sara Montiel en las fotos que ilustran el presente reportaje. Una Sara envuelta en brumas de cabaret, llena de proyectos e ilusiones. 

-¿Crees que Pepe es el hombre que puede aportar serenidad y cariño a tu vida sentimental?
-Por supuesto, si no ya no me casaría con él. Tengo la seguridad de que junto a él encontraré, aun después de casada, el mismo cariño y ternura que tengo ahora.
-¿Viviréis en Palma?
-En realidad ya vivimos ahora en Palma, lo que sucede es que cuando trabajo vivo en Madrid o en Barcelona o hago galas por todos los puntos de España, pero en cuanto tengo unos días libres me voy a la maravillosa casa que tenemos en Palma desde donde se domina toda la bahía y la ciudad. Es una casa muy bien situada y con una vista maravillosa.
-Y, profesionalmente, piensas en seguir en la brecha…
-Sí y estoy llena de proyectos. Mira, voy a hacer dos películas: una, dirigida por el italiano Duccio Tessari, que se llamará ‘Doña Bárbara’, y la otra dirigida por Pedro Olea que no tiene título. Las dos serán en plan de gran actriz, sin cantar, demostrando tan sólo mis posibilidades dramáticas.
-En teatro sigues teniendo gran éxito con tu espectáculo ‘Saritísima’.
-Sí, fue muy bien en Barcelona y ahora está yendo de maravilla en Madrid. Al público le gusta el espectáculo y le gusta cómo estoy yo y cómo canto.




-¿Te gustaría tener hijos?
-Sí, y ya he ido al ginecólogo. Un hijo sería mi ilusión y espero tenerlo con Pepe. Ser madre es lo más importante del mundo. Por eso estoy contra el aborto.
-Pepe ha dejado su trabajo en el diario mallorquín, ‘Última hora’, para estar más cerca de ti, para ser tu mánager.
-Sí, es algo que decidimos los dos para estar más tiempo juntos. De todas formas Pepe sigue manteniendo sus negocios de cine y teatro en Palma, que no piensa dejar.
Con todos sus proyectos de orden sentimental y privado Sara está ahora más feliz que nunca, guapa como estas dos fotos demuestran pese a quien diga lo contrario y con muchas ganas de seguir dando guerra en el mundo del espectáculo. Es nuestra ‘Saritísima’.



Fotos: GUMER FUENTES


LA FOTO LXIV



La artista, varios años después del fallecimiento de Pepe Tous, posaba sosegada y tranquila para las cámaras. 

sábado, 5 de mayo de 2012

LECTURAS - 11 de Septiembre de 1992 - España


SARA MONTIEL
destrozada por la muerte de su marido
“Seguiré luchando por mis hijos”



La tragedia ha roto lo que era una familia feliz: Pepe, Sara y sus hijos, Thais, de 13 años y Zeus, de 9

A las cinco y diez minutos de la tarde, ante los ojos de Sara Montiel, el martes 25 de agosto se convirtió en el día más trágico en la vida de la artista. Con el último aliento de Pepe Tous, Sara perdía al esposo, al amigo, al compañero y el apoyo profesional que había dado sentido a su vida en estos últimos años.
La alegre y luminosa casa de Palma de Mallorca donde vivían felices, en los mejores momentos de sus vidas, se transformó en poco tiempo en el cruel escenario de una pérdida que ha caído como un mazazo sobre ese mito manchego que es Sara.
Con el temple de un hombre bueno, amable y carismático, Pepe Tous vivió estos tres últimos meses sin conocer el alcance total de su enfermedad. Su vida, minada por un cáncer de colon, se apagó en un día soleado y caluroso de agosto. Poco a poco, y como en un suspiro, Pepe hablaba bajito, sus fuerzas le abandonaban. Junto a su cama, su hija Thais, que le dio su último beso.
En su casa de Palma, Pepe Tous era cuidado día y noche por su Antonia –Sara Montiel- del alma. Con ella estaba el doctor Juan Buades, cualificado internista y amigo por encima de todo. El cáncer de colon, con metástasis hepática, que le ha llevado a la tumba, le fue diagnosticado en el mes de mayo, cuando fue operado en el Hospital de Barcelona. Por aquel entonces el diagnóstico feroz dejó atónito al doctor Modolell, eminente oncólogo de Barcelona. Se decidió la ayuda química. Durante días Pepe Tous acudía a la clínica Corachán para tratarse con quimioterapia. Desde Palma a Barcelona, Pepe iba animado, sin saber el alcance real de lo que tenía. Pero un día de agosto, esta ayuda química ya no le sirvió. Su estado se fue agravando y Pepe Tous se quedó en su ático del edificio Mediterráneo, en Palma. Muriendo lenta, pausadamente. Cerca de él, Sara, rota y llorosa a escondidas, interpretaba el papel más triste de su vida…; su amor se moría y ella no quería que él se diera cuenta…


La artista, con las huellas del dolor en su cara, recibió la visita y el consuelo de José Bono, presidente de Castilla-La Mancha. 


A la casa familiar acudió el Delegado del Gobierno en Palma, Gerardo García. 
Sara atendió personalmente una de las numerosas llamadas de pésame. 

El cuerpo inerte de Pepe Tous fue trasladado desde su domicilio al cementerio de Palma, en espera de ser llevado a Barcelona para ser incinerado en el crematorio de Collserola. A pocos metros, en la que antes había sido su casa, su mujer, M.ª Antonia Abad Fernández, se abrazaba a su hija Thais. Las dos lloraban en silencio. Thais, a sus 13 años, se ha convertido en el apoyo de su madre. Su hermano Zeus, de 9 años, había sido trasladado a Pollensa a casa de unos amigos. El ático lleno de luz empezó a llenarse de personas, de llamadas telefónicas. Sara, atendida por el doctor Buades y sus más íntimos amigos, estaba como ausente. Los tranquilizantes le servían de apoyo. Muy cerca de ella, Paco Fernández, la mano derecha de Pepe Tous y administrador del matrimonio, atendía aturdido el teléfono. El dormitorio de Sara era el refugio de esta manchega que en pocas horas se había convertido en una desconsolada viuda, después de tres meses de lucha encarnizada con la enfermedad que acabó separándola de su palmesano del alma.
La misma noche de la muerte de Pepe, Sara intentaba conciliar el sueño, con su hija y con Margarita, la ahijada de Pepe. Fue casi imposible; el miércoles por la mañana, los bellos ojos de la actriz estaban casi secos de tanto llorar. Fue un abrazo, largo y estrecho, el que nos dimos… -ella, temblorosa y más pequeñita, me decía con voz entrecortada: “Ya no está. Se ha marchado para siempre. Se ha marchado como en un sueño”. Sus ojos intensos miraban hacia dentro, su luz, su alegría, se había apagado. M.ª Antonia Abad era una mujer rota…


Sara y su hija Thais en el despacho de Ppe Tous, decorado con numerosas fotografías de familia. Abajo, el telegrama que los Reyes enviaron a la actriz: "En estos tristes momentos nos acordamos mucho de ti y te enviamos nuestro más sentido pésame, extensivo a toda la familia".

Desde el martes en que falleció Tous hasta la tarde en que fue trasladado hasta Barcelona, su viuda atendió todas o casi todas las visitas y las llamadas telefónicas. Centenares de telegramas fueron llegando al domicilio, entre los primeros el de los Reyes. Continuamente llegaban condolencias de todos los puntos de España. El edificio Mediterráneo empezó a ser testigo de la presencia de numerosas personas, amigas de Pepe y Sara que querían estar cerca de ella. Incluso viajó desde Toledo, para estar junto a M.ª Antonia, el presidente de la comunidad de Castilla-La Mancha, José Bono, que llegó acompañado del delegado del Gobierno en Palma, Gerard García. Cuando las visitas se van, Antonia se sienta en el salón y poco a poco, con voz entrecortada, nos explica todo su drama. La angustia en la que está metida. Su sufrimiento, su dolor…
“Es todo tan terrible… he perdido a una persona fuera de serie, era un padre maravilloso, era un amante maravilloso, un amigo maravilloso, un compañero maravilloso. Es irremplazable. Ya mi vida como mujer está terminada totalmente, porque ya nada más estaré viviendo con mis hijos, para mis hijos y por mis hijos. Seguiré adelante por ellos… y me he quedado muy sola sin él”.  
Sara acaba de tomarse un café con leche descafeinado. Casi a la fuerza. Toma sorbo a sorbo. Mira sin mirar y su voz, más apagada que nunca, contesta a mis preguntas.
-Pepe quería por encima de todo que tú siguieras trabajando en tu programa ‘Ven al Paralelo’, ¿seguirás adelante?
-Sí. Se lo debo a él. Se lo debo porque siempre luchó por mí, supo arroparme, protegerme y hacer de mi carrera un verdadero éxito. Pepe me lo pidió y ahora que no está aquí, a mi lado, me lo sigue pidiendo. Sé que tengo que volver al trabajo, porque me ayudará a seguir, a pasar este momento tan triste y tan desesperante. Me dedicaré a mis hijos, a mi trabajo y procuraré salir adelante como pueda.
Su voz se apaga. Se toma uno de los tranquilizantes que le ha recomendado el doctor Buades. Se mueve nerviosa, se levanta, se sienta y me mira ausente. Es tan grande su tristeza, que se nos hace un nudo en la garganta…
-Antonia, ¿cómo han sido estos tres meses últimos junto a Pepe, él supo el alcance de su enfermedad, supo que se moría?
-Este tiempo no se lo deseo ni a mi peor enemigo. Han sido tres meses findiendo, tres meses horrorosos. Sonriendo siempre, maquillándome, arreglándome siempre. Él nunca supo el alcance de su enfermedad, cuando le operaron en Barcelona en el mes de mayo, él estaba seguro de su mejoría. Nunca supo que el mal estaba tan dentro de él. Nunca permití que supiera que se moriría tan rápido. Cuando nos trasladábamos a Barcelona para las sesiones de quimioterapia Pepe estaba con la esperanza de reponerse muy pronto. Todo ocurrió tan rápido. En los últimos quince días, el cáncer lo fue minando rápidamente. Lo único que puedo deciros es que murió como en un sueño…, tranquilo como en un suspiro. Con mis manos cogidas…, todo es tan cruel, tan doloroso. 


Un instante del funeral: detrás de Sara está el sobrino de Pepe Tous. A la derecha, Sara y su hermana Elpidia. 

Sara se ha maquillado ligeramente, no tenía ganas de hacerlo pero a su marido le gustaba que siempre estuviera arreglada. “Durante estos meses Pepe me decía: ‘Amor, arréglate, por lo menos hazte las cejas, que no te vean desarreglada, no quiero verte sin los ojos pintados. Píntate aunque sea un poquito los labios’. Yo siempre he tenido las cejas muy finas y por eso Pepe me decía: ‘Hazte las cejas que te he conocido siempre en las películas, que te las pintas muy bien…, ‘amor’, no estés desarreglada…”.
-¿Qué quieres que se recuerde de Pepe y que ha quedado de él en tus hijos?
-En sus hijos ha quedado su respeto, su cariño, que me quieran, que estudien para que el día de mañana puedan defenderse. El ha estado siempre con ellos, en ellos ha quedado su amor por Mallorca, por su raíces, por las de Pepe y también por las de ellos, pues aunque Thais nació en Brasil y Zeus en Alicante, al mes ya estaban aquí y son totalmente palmesanos.
-Dentro de unas horas, Antonia, te trasladas a Barcelona para incinerar los restos de tu marido. Después las cenizas piensas esparcirlas aquí en Mallorca. Me figuro que todo esto lo teníais hablado, ¿verdad?
-Sí, desde que hicimos testamento los dos habíamos acordado que el día que nos muriéramos nuestras cenizas estarían en este mar de Mallorca, que Pepe tanto quería.


Sara, con su amiga de toda la vida, Mercedes Arroní, y Pep Roses, socio y amigo del fallecido Pepe Tous. 

Sara, a su llegada al aeropuerto de Barcelona, es ayudada a bajar.

Con su amiga Mercedes. 

La sin par Sara Montiel era la imagen viva de la desolación. Los restos de Tous fueron trasladados a Barcelona para ser incinerados. 

-Antonia, ¿tu hija Thais es consciente de toda la tragedia, de la enfermedad que terminó con la vida de su padre?
-Sí, ha sido consciente desde el principio. Zeus, no. Porque el doctor Buades le hizo un test psicológico antes de que muriera su padre, para ver cómo estaba el niño, y me dijo que no podía estar presenciando todo, que no podía ser. Que era todavía muy niño.
La entereza de Sara nos hace a veces enmudecer; lleva su dolor serenamente, llora en silencio, sin ruido, tranquilamente.
-¿Fue tu marido el gran impulsor de tu carrera?
-Sí, él me aconsejaba muchísimo. El me apoyó en todo y me impulsó. Te puedo decir que tardé en encontrar el amor, pero cuando lo encontré a su lado fue totalmente feliz. Es el auténtico amor de mi vida, el único. Nunca he amado a nadie como a Pepe.
-¿Seguirás oyendo la voz de Pepe en tu interior?
-Siempre, date cuenta que él ha sido un hombre que nos lo dio todo. Preocupado por mí, por su hijos. He sido una persona muy afortunada, porque con Pepe he conocido el amor. El amor con mayúsculas. A su lado he tenido absolutamente todo. He tenido al compañero, al amante, al amigo. Su amor estará siempre conmigo.


La artista sujeta en sus manos la urna con las cenizas de su marido. 
Ya de regreso en Palma con sus amigos Pep y Mercedes. 

Más de 20 años de amor y felicidad
Las vidas de la estrella Sara Montiel y del periodista, empresario y ‘soltero de oro’ Pepe Tous Barberán se cruzaron en Palma de Mallorca el 28 de febrero de 1970. Ese día, la actriz y el empresario, que la acababa de contratar para presentar en el teatro Balear el espectáculo ‘Sara Montiel en persona’, fueron presentados sin que ni uno ni otro se sintiera especialmente atraído. Para Tous se trataba de una diva poco menos que inalcanzable. “El nuestro –decía años después Sara- no fue un enamoramiento súbito. Fue un amor que entró poco a poco y que me llenó como nada antes lo había hecho”.




Sara y Pepe se casaron en Palma de Mallorca en julio de 1979 cuando llevaban más de cinco años de convivencia. 
Sara, convaleciente de una operación en el pie en Julio. 

Tous era considerado entonces en su ciudad natal de Palma poco menos que un solitario; su soltería y su excelente posición en el mundo del espectáculo como empresario teatral, además de su don de gentes y su posición heredada quizá de su formación periodística, le habían valido el título de ‘soltero de oro’ de la isla de Mallorca. Por su parte Sara venía rodeada de su aureola de mito del cine y del espectáculo, la increíble Sara, la más internacional de las artistas españolas, nuestra pica en Hollywood, casada y divorciada del gran director Anthony Mann y relacionada con Gary Cooper a raíz del rodaje de ‘Veracruz’. Tous también manifestó tiempo después que Sara no era un personaje que, en aquel momento, le atrajera especialmente. En aquellos momentos Sara, separada de su segundo marido Vicente Ramírez Olalla, mantenía una tensa e irregular relación con el actor italiano Giancarlo Viola, pero cuando fue conociendo a Pepe Tous la actriz se dio cuenta de que aquél era el hombre de su vida. “Sentí –diría años después- que mi vida necesitaba estabilidad, amor, formar una familia y tener hijos”. Pepe Tous sería para ella la encarnación de todo aquello que necesitaba. Después de un tiempo rompió definitivamente con Viola.
Pepe, que había nacido en la calle Miguel Marqués de Palma el 22 de noviembre de 1932, se dedicaba por aquellas fechas a la dirección del diario ‘Última Hora’, fundado por su abuelo José Tous Ferrer hace ahora un siglo. Hasta 1974, la fecha en que inició su convivencia con Sara, lo dirigió haciendo de él un diario moderno y permanentemente enfrentado al régimen anterior, simultaneando aquel trabajo con el de empresario teatral. Sus comienzos en ese campo fueron las relaciones públicas y la publicidad de los locales de su familia, el teatro Balear y el cine Born, y poco después la representación de su nuevo y famosísimo amor, la sin par Sara Montiel. Desde esta nueva faceta, y una vez abandonado su trabajo en el periodismo, creó y dirigió las salas de fiestas Tagomago y Rosales, entre otras, y el Teatro Bingo Balear. Pero una de sus actividades más intensas y satisfactorias fue sin duda la de dirigir la carrera de Sara que, en su faceta de artista de variedades, ha cosechado magníficos éxitos de los que, en gran parte, se deben a la excelente organización de Pepe Tous.


La llegada de sus hijos Thais, en mayo de 1979 y Zeus en julio de 1983 hizo de ellos una familia unida y colmada de felicidad. 

El compañero y gran amor de Sara, que ya le daba estabilidad y cariño como ella nunca había tenido, quiso también darle los hijos que Sara deseaba. No pudo ser, Sara padecía una enfermedad conocida como el ‘edema de King’ que le provocó varios abortos y, finalmente, decidieron la adopción del primero de ellos, Thais. Fue en mayo de 1979 cuando la niña, nacida en Paraná (Brasil) tenía apenas dos meses. Siempre de acuerdo en estos temas tan trascendentales, Pepe y Sara acordaron que la niña llevara los apellidos de ella, Abad Fernández, hasta el momento en que ambos contrajeran matrimonio. Para entonces Sara había conseguido ya la nulidad de su matrimonio con Vicente Ramírez y poco después, el 31 de julio del mismo año, 1979, la pareja contraía matrimonio en el Palacio de Justicia de Palma.
Tanto Sara como Pepe decidieron dar el paso de su boda únicamente para dar sus apellidos y legalizar la situación de Thais. 


El segundo hijo, la parejita, vendría el 1983. El 13 de julio de ese año Zeus, nacido en Alicante el 21 de mayo anterior, completando la felicidad de la familia.
De estos años de felicidad y convivencia queda una viuda desconsolado, dos hijos que han perdido a su padre querido, infinidad de amigos en la prensa, en el espectáculo y en su Palma natal, y una larga lista de éxitos que Sara ha conseguido en el teatro no sólo por su extraordinaria profesionalidad, sino también por el trabajo, el amor y el genio de un insustituible compañero.


Thais cumplió 13 años el pasado día 3 de marzo y Zeus 9, el 21 de mayo. 

Chelo García-Cortés
Fotos: CH.G.-Cortés – Lluís Bou-M.G.-Cortés



EL RECORTE LXIII
Sin ninguna duda, la muerte de Pepe Tous fue uno de los capítulos más nefastos para la vida de nuestra estrella. No sólo por la pérdida del 'amor de mi vida', sino, también, por la situación que se le venía encima. Los restos de Pepe acabaron en las aguas de su adorada Palma. Así lo relataba la revista Lecturas el 18 de Septiembre de 1992. 

Sara Montiel
Esparció las cenizas de Pepe Tous
 en el mar
Con huellas de profundo dolor en su rostro y en su corazón la artista cumplió el último deseo de su esposo y entregó sus cenizas a las sosegadas aguas de la isla mallorquina. Sara vivió unos momentos de intensa emoción en medio del mar que siempre fue testigo del gran amor que les unió. 


Sara es ayudada por su hija Thais a esparcir parte de las cenizas de su marido al mar, ante la atenta mirada de Zeus. La artista entregó los restos de su marido al mar en dos diferentes lugares de la costa mallorquina. 

La artista realizó la ceremonia a bordo de una zodiac, tripulada por Lorenzo Roses, hijo del gran amigo de Pepe Tous.

Sara Montiel se dispone a abrir el ánfora donde estaban las cenizas de su esposo para iniciar el ritual fúnebre. 

Lanzando unas flores al mar desde su barco, frente a Ciudad Jardín. 

El pasado lunes 7 de septiembre, tras diez días de espera, Sara Montiel pudo cumplir el deseo de su marido Pepe Tous: esparcir sus cenizas en aguas mallorquinas. Durante el transcurso de ese tiempo, María Antonia Abad, se asomaba cada jornada a la terraza de su casa de la isla, para ver si el mar, ese mar que tanto amó su marido, volvía a la calma y sus cenizas podían reposar allí para siempre.
La imagen frágil y enlutada de Antonia Abad llegó a las cercanías de Puerto Portals, donde estaba anclado el ‘Thais Zeus 2’, el barco en el que ella se trasladó, con sus más íntimos amigos, hasta la cala de Camp de Mar en Andraitx.
Empequeñecida, totalmente vestida de negro y la melena al viento, M.ª Antonia subió al barco. Cerca de ella, muy cerca, Mercedes Arroni, Nela, Pepe Vila, Paco Fernández, todos ellos compañeros inseparables del matrimonio.
Durante casi una hora que duró la travesía, Sara mantuvo sus bellos, y ahora tristes, ojos puestos en la inmensidad del mar. Como en un susurro, se oía su voz: “No he querido ponerme de blanco, como a Pepe le gustaba, porque puede ser que alguien no me interpretara bien”. Sus manos se entrelazaban nerviosas, sus hijos Thais y Zeus no estaban, vendrían más tarde. Con su voz cansada por el sufrimiento me seguía diciendo “Hoy era su primer día de colegio y  no quería que perdieran las clases, además, no deseaba que pasaran por esto, son muy pequeños. Lo que ocurre es que tanto Thais como Zeus querían venir y los recogeremos cuando salgan del colegio”, comentaba.
Cuando llegamos a Camp de Mar, Sara descendió del barco y en una zodiac, acompañada por Lorenzo Roses, se dispuso a cumplir su promesa a Pepe. Sus cenizas empezaron a ser esparcidas en ese lugar que él y ella habían elegido años atrás para estar juntos tras su muerte. Mientras, junto al barco de Sara estaban los de sus más íntimos amigos. Todos al unísono tocaron sus bocinas y las flores empezaron a rodear la zodiac donde Antonia Abad, se despedía de su gran amor. Sus ojos llenos de lágrimas indicaban su sufrimiento. 

Sara, destrozada por el dolor, junto a sus dos hijos a bordo de su embarcación 'Thais Zeus 2'.

La artista a su llegada a Puerto Portals, donde le esperaban sus más íntimos amigos para asistir a la ceremonia. 

Sobre las cuatro y media de la tarde esperaban en Puerto Portals a su madre Thais y Zeus; los dos con el semblante serio subieron al barco. Se aproximaba el final de la ceremonia. Cuando llegamos a Ciudad Jardín, Sara me dijo como en un susurro: “Aquí, mi marido pasó los años de su infancia y durante la guerra también vivió aquí. Es uno de los sitios que a Pepe le gustaban más de su querida Palma”. Cerca, muy cerca, del ‘Thais Zeus 2’ estaba el barco de los Roses y el de Luís Cobos, gran amigo del matrimonio. “Hace ahora un año nos estábamos bañando aquí todos. Ninguno de nosotros podíamos pensar en este desastre. Nadie se puede imaginar lo sola que me siento, tengo rabia, desesperación, necesidad de estar con él. Me ha dejado tan sola…”
María Antonia y sus hijos subieron a la zodiac. Thais ayudó a su madre a esparcir el resto de las cenizas de su padre. La niña estaba seria, miraba a su madre y a ese mar que se estaba llevando las cenizas del hombre que les dio todo su amor. Zeus miraba asombrado todo lo que estaba ocurriendo.
“Mis hijos nunca podrán olvidar a su padre”, decía Sara. La música clásica nos acompañaba, mientras Sara y sus hijos terminaron de esparcir las cenizas de Pepe Tous. Sara, más hundida si cabe, se refugió en el barco. Cerca de ella, su hija Thais estaba constantemente pendiente de su madre…
La música cesó y el sol empezó a ponerse, mientras las cenizas de Pepín Tous se sumergían. Antes de despedirnos, Antonia nos dijo… “Cuando yo me muera traedme con él…”.


Sara vistió de negro. 

Chelo García-Cortés
Fotos: G.C.


LA FOTO LXIII

Celebrando los 50 años de 'La bella Lola'